El estrés es la forma en que nuestro cerebro y cuerpo responden a las demandas del entorno. Cualquier tipo de evento, ya sea positivo o negativo, puede causar estrés, y hasta cierto punto es parte de la vida de todos. Generalmente se considera dañino, pero de hecho, no todo el estrés es malo. Por ejemplo, en ocasiones puede motivar a las personas a cumplir retos difíciles.
El estrés afecta mucho más que la forma en que nos sentimos. También puede afectar nuestra salud física. Un ejemplo de esto son las migrañas, o “dolores de cabeza causados por estrés”. También puede influir sobre nuestro apetito, dormir, elevar nuestra presión arterial y mucho más. El estrés a largo plazo o crónico puede afectar nuestros sistemas cardiovascular, inmune, digestivo y gastrointestinal. Afortunadamente, hay muchas formas diferentes de lidiar con el estrés. Algunos pueden funcionar mejor para ti que otros, pero todos pueden ayudarnos a manejarlo de una manera saludable.
Algunas cosas simples que puedes hacer cuando te sientes estresado incluyen:
Esta es una breve lista y hay muchas otras formas de manejar mejor el estrés. Échales un vistazo a estos otros recursos.
Si manejar el estrés por tu cuenta no es suficiente, ¡busca ayuda! Habla con un profesional de la salud. Si encuentras que el estrés está afectando negativamente tu salud general o tus relaciones, existen muchos tratamientos efectivos.